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Cuidarte, como mujer, también implica procurarte alivio cuando sientes cólicos y serenidad a pesar de los cambios hormonales. ¡Que en tu dieta no falten estos geniales ingredientes!

Moras: Sus niveles de antioxidantes, vitaminas y minerales son importantes para el funcionamiento del cerebro, protegiendo tus células y mejorando tu humor.

Pescado: Es fuente de grasas buenas, proteína, hierro, vitaminas y minerales que ayudan al cuerpo a funcionar de la mejor manera. Salmón, atún y sardinas son perfectos.

Hummus: Este alimento está hecho de garbanzos, aceite de oliva, limón y ajo, ingredientes conocidos como antinflamatorios y que pueden, por tanto, aliviar el dolor.

Chocolate oscuro: Es bajo en grasa y además delicioso. Cuenta con magnesio, que incrementa tu energía. También lo componen endorfinas, que te darán una sensación de felicidad.

Aguacate: Está lleno de grasas saludables, fibra, magnesio, potasio y vitamina E y B6, lo cual incide en el equilibrio de tus hormonas.

Zumos rejuvenecedores

Son los ingredientes de estas maravillosas frutas los que te ayudarán a cuidar tu belleza y lozanía. Disfrútalos a cualquier hora del día, pero de preferencia en el desayuno.

Zumo de frambuesa y cereza

Es un aporte extra de vitaminas B, C y D, carotenos, minerales y antioxidantes. Añade hielo y zumo de limón para un jugo perfecto.

 

Zumo de tomate, aguacate y limón

Te ofrece vitaminas B y C, betacarotenos y ácio fólico. Además de los ingredientes básicos, agrega sal, pimienta y sirve frío.

 

Zumo de naranja, fresas y kiwi

Esta bebida revitalizante es rica en vitaminas B y C. ¡Bate y listo!

 

Zumo de papaya, piña y naranja

Sus vitaminas B, C y minerales serán tus aliados antiedad y te ayudarán a adelgazar. Mezcla todo y sirve.

 

Zumo de apio, remolacha y col

Ayuda a combatir los efectos de los radicales libres. Contiene vitaminas B, C y K, así como ácido fólico. Al licuar, puedes anadir un trozo de manzana.

 

 

 

Fuente: Revista Mariela

En el período de la premenopausia el cuerpo de la mujer empieza a producir menos hormonas de estrógeno, el descenso de estas son las responsables de la mayoría de los cambios que se dan durante este período hasta llegar a la menopausia que se define por la ausencia total de períodos por un año continuo.

El tiempo durante el cual empiezan a producirse cambios como interrupciones de los períodos, calores, cansancio, resequedad de la piel, de la mucosa de la vagina pueden empezar 5 años antes de llegar a la menopausia, usualmente se presenta este estado entre los 45 y 55 años.

Uno de los mayores temores es que durante este período se pierda el brillo de la piel, del cabello, del placer durante el acto sexual por falta de lubricación, el aumento de colesterol con el riesgo cardíaco que representa, la facilidad para acumular grasa por ralentización del metabolismo, la pérdida de masa ósea

Destaco este punto para recordar que si nos acercamos a una edad donde los niveles de estrógeno empiezan a bajar debemos empezar a aumentar los consumos de alimentos ricos en antioxidantes como los vegetales y las frutas. El estrógeno activa rutas de señalización en las células grasas, regula el metabolismo de este tejido controlando su crecimiento y su proliferación.

Si los niveles de estrógeno son óptimos La leptina estará en su mejor nivel y esta es una hormona producida por el tejido graso que controla el apetito. La ciencia nos demostró que en la premenopausia los niveles de leptina se correlacionan con los niveles de estrógeno. Si tenemos buenos niveles de leptina significa que será más fácil controlar el hambre.

Cuando la mujer llega a la menopausia y desarrolla obesidad ya no hay correlación entre estrógeno y leptina.

Aprendamos entonces a considerar la alimentación como una herramienta para mantener la salud, la energía y el peso forma durante todas las etapas de nuestra vida, si no lo hemos hecho todavía comuniquémosle a los profesionales de la nutrición para que nos ayuden a entender la magia de la nutrigenómica en donde se utilizan los alimentos para mantener en equilibrio el sistema hormonal garantizando de esa forma todas las funciones del organismo.

 

Pero, ¿que nos dice la ciencia al respecto que podamos usar a nuestro favor? Los estrógenos son parte de los sistemas de señalización del cerebro. Cuando hace falta el cerebro puede producirlo a partir del colesterol. Necesitamos suficientes receptores de estrógenos para que este cumpla su papel y estos receptores han sido identificados tanto en las neuronas como en las células del sistema nervioso.

También se han localizado estos receptores en las mitocondrias que es donde se lleva a cabo la conversión de lo que comemos en energía. Dejando clara evidencia de que los estrógenos intervienen en la regulación bioenergética de nuestras células.

El estrógeno incrementa la producción de enzimas antioxidantes y recordemos que el efecto antioxidantes es el protector antienvejecimiento.

Fuente: Revista Mariela

Ya sea durante una estadía en un hotel, en una casa en la playa o durante una noche en la casa de un amigo, en general nunca se duerme tan bien como en la cama propia. Salvo excepciones, las camas ajenas no logran alcanzar las comodidades y particularidades del lecho que nos alberga todas las noches.

Si bien hace tiempo que la ciencia sabía del fenómeno, no pudo nunca atribuirle las causas. Hasta ahora. En un pequeño estudio publicado en Current Biology, investigadores de la Universidad Brown, de Estados Unidos, descubrieron lo que ocurre en el cerebro cuando una persona duerme en un lugar desconocido y poco familiar.

En un hotel, o en una casa ajena, es dificil descansar bien (iStock)
En un hotel, o en una casa ajena, es dificil descansar bien (iStock)

Para averiguarlo, midieron la actividad cerebral durante el sueño profundo de 35 personas jóvenes y sanas. Así fue que los investigadores encontraron evidencia de que algo único realmente sucede en el cerebro durante la primera noche: un hemisferio del cerebro, el izquierdo, demuestra vigilia mientras que el otro demuestra sueño. Este estado de alerta durante el sueño en la mitad del cerebro ya había sido observado en otros animales, incluyendo ballenas, delfines y aves, y se piensa que actúa como una especie de «vigilancia nocturna», ante la amenaza de depredadores.

«El ambiente es tan nuevo para nosotros, que puede ser que necesitemos un sistema de vigilancia para que podamos monitorear el entorno y detectar algo inusual», explicó Masako Tamaki, uno de los autores del estudio e investigador asociado en el laboratorio de Aprendizaje Cognitivo y Perceptual en la Universidad de Brown. Somos más vulnerables cuando estamos dormidos, en otras palabras, y al permanecer parcialmente despiertos, nuestros cerebros podrían estar tratando de protegernos.

En una cama ajena el cerebro permanece en un estado de vigilancia  (iStock)
En una cama ajena el cerebro permanece en un estado de vigilancia  (iStock)

Los investigadores también descubrieron que cuando equipaban a las personas en el estudio con auriculares, el lado izquierdo mostraba una mayor respuesta cerebral a los sonidos agudos que la derecha, lo que sugiere una mayor vigilancia en ese hemisferio.

Esta investigación plantea una gran cantidad de nuevos interrogantes. Los autores todavía no saben por qué vieron este efecto en el hemisferio izquierdo y no el derecho. Pero curiosamente, estas dos asimetrías sólo ocurrieron en la primera noche, luego se normalizaba. Algo a tener en cuenta la próxima vez que haya que dormir en un lugar extraño

Fuente: Metro Ecuador