Otro año más tenemos que enfrentarnos a la cena de Navidad de la empresa. Te tocará aguantar a los pesados de tus compañeros hablando sobre los regalos que tiene preparados para sus niños, a la jefa riéndose de aquella vez que te hizo trabajar hasta las doce de la noche y al secretario enseñándote las fotos de sus gatos. ¡Vamos, toda una delicia!
Pero también puede ser la noche perfecta para que te lances a esa persona de la oficina que te gusta desde que entraste o para echarte unas risas con tus colegas del trabajo. Porque la Navidad también es para eso. Aquí proponemos cinco temas que irían perfectos para tu cena de empresa.
El tema más recurrente en una cena de empresa es hablar mal de tu jefe. ¡Eso es así! Aunque éste o ésta sea la persona más maravillosa del mundo y pueda competir directamente en bondad con Santa Teresa de Calcuta. Los jefes son jefes y está en el ADN humano quejarnos de ellos. Si se trata de una jefa te animamos a que le dediques la canción de Mala Mujer. ¿Por qué no?
Más de uno y una necesitará Otra copa para poder sobrevivir a la cena de empresa. Además, es en la sobremesa cuando realmente se establecen lazos con los compañeros. Así que, ¿por qué no pedir otra copa?
Que tus jefes aprovechan la cena para decirte a ti y a tus compañeros que uno de vosotros tiene que quedarse a trabajar en Navidad. ¡No te preocupes! Ponle el estribillo del tema de Jennifer Lopez: Ni Tú Ni Yo. Lo mismo así captan la indirecta.
En toda cena de empresa está el típico compañero que os lía a todos para acabar. Y como todo el mundo está de cenas navideñas y también tienen a su propio liante, todos los pubs guays están con aforo lleno. Vamos, que acabas en un antro bailando junto a la secretaria y pidiéndole al DJ todos tus temas favoritos.
Claro, entre el bailoteo en el bar y las copillas de más, has perdido la cartera. ¿O te la han robado? Jurarías que la llevabas antes de salir a la calle. Pues nada, te toca llamar al 911 y denunciar que te han robado. Menos mal que tu jefe no es tan malo y se ha quedado hasta el final de la noche. Te dice que te deja el dinero para el taxi que te lleva a casa. Eso sí, lo descontará de tu siguiente nómina.