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5 opciones para cubrirte del frío sin opacar tu vestido

5 opciones para cubrirte del frío sin opacar tu vestido

Cuántas veces nos hemos topado con el dilema de encontrar el vestido de fiesta perfecto, y no poder lucirlo porque el frío nos obliga a cubrirnos con un enorme abrigo.

O en su defecto, con tal de no ocultar el vestido optamos por ponernos sólo un ligero chal o suéter y pasamos la noche congelándonos o terminamos por colgarnos el saco de nuestro acompañante.

La ventaja es que cada vez hay más opciones para cubrirnos del frío sin sacrificar la elegancia, y seguro encontrarás el complemento ideal para lucir perfecta.

Leather jacket:

La moda de combinar los ‘party outfits’ con chaquetas de cuero se inició hace unos años, y aún es una tendencia que se puede llevar, pero con cuidado.

¿Cómo? Pues todo depende del estilo de tu vestido y tu chamarra, que deben combinarse sin chocar. La idea es que la leather jacket le de un aire más divertido a un vestido clásico, o un toque sofisticado a un look más sencillo, pero sin duda es una apuesta segura para triunfar en tus noches.

Pieles ¿sí o no?:

Además del debate sobre el maltrato animal, llevar abrigos de pieles es algo muy complejo, tanto por el estilo del abrigo como el tono del evento.

Aunque hay muchas y buenas opciones de abrigos de piel sintética, si decides optar por uno de estos deberás tener especial cuidado con no sobrecargar el resto del atuendo, pues no queremos hacernos notar por las razones equivocadas.

Capas:

Otra alternativa está en buscar una elegante capa o abrigo a la altura de la rodilla o incluso al tobillo, ya sea estampado (para darle vida a un vestido de tela lisa) o en un tono neutro, para contrastar.

Saco:

Un elegante blazer o trench coat en un tono pastel o suave, siempre diferente al color del vestido, es una opción tanto cómoda como en tendencia. Puedes probar también con chaquetita corta ligeramente entallada, así conseguirás dulcificar el look y aligerar el conjunto.

Eso sí, evita siempre los sacos estilo traje sastre, que además de verse fuera de lugar le restan toda la elegancia a tu atuendo.

El chal:

Es un accesorio que hay que saber llevar para darle un aire diferente. Existen tantas opciones como telas y colores, pero la regla principal es evitar siempre que sea de la misma tela del vestido, ¡la combinación mortal!

Debes seleccionarlo de acuerdo con el clima y la hora del evento. Si es de noche y hará frío, no puedes llevar uno muy ligero, por más lindo que sea, y debes buscar que haga un buen contraste con tu vestido.

Si no estás cómoda con él y crees que terminará hecho nudo o amarrado en el vestido, es mejor renunciar y buscar otra opción.