Todo el mundo sabe que es necesario cepillarse los dientes varias veces al día para prevenir las caries. ¿Pero alguna vez te has preguntado si lo haces correctamente? Está muy bien cepillarse los dientes todos los días, ¡pero debes hacerlo de la forma correcta! Aquí enumeramos 20 errores que podrías estar cometiendo cada vez que te cepillas los dientes.
En oposición a lo que tus padres podrían haberte enseñado, no debes cepillarte los dientes inmediatamente después de una comida, ¡incluso si tienes mal aliento! Se recomienda que esperes unos 30 minutos para permitir que el pH de la boca regrese a los niveles normales, ya que ciertos alimentos ácidos pueden debilitar el esmalte de los dientes.
Las apariencias podrían no ser suficientes para saber cuándo deshacerse del viejo cepillo de dientes y comprar uno nuevo. Por lo general, debes cambiar el cepillo cada tres meses. Las investigaciones han demostrado que usar un cepillo viejo puede causar más complicaciones que beneficios para tus dientes. ¡Después de tres meses, las bacterias y las partículas de comida pueden alojarse de forma permanente en las cerdas!
Muchos de nosotros pasamos por alto cepillarnos la lengua cuando nos cepillamos los dientes. Si bien la lengua no necesita tanto cepillado como los dientes, se requieren unas cepilladas de forma regular para deshacerse de las bacterias en la boca que causan mal aliento.
Se recomienda que los adultos se cepillen los dientes a diario con una pasta de dientes que contenga flúor. Se sabe que el flúor protege el esmalte de los dientes contra los ácidos responsables de causar las caries dentales.
A diferencia de los platos sucios, cepillarse los dientes más fuerte no necesariamente significa que queden más limpios. De hecho, esto incluso podría tener el efecto contrario y dañarlos. Este efecto abrasivo se reduce si te cepillas más despacio.
Un cepillo más duro no necesariamente limpia mejor que uno con cerdas más blandas. Las organizaciones dentales, en realidad, sugieren usar un cepillo de cerdas blandas. El riesgo de lastimarte las encías, por ejemplo, será menor y tú tendrás mayor flexibilidad.
Colocar una gran cantidad de pasta de dientes en el cepillo no hará que el cepillado sea más eficaz. De hecho, es solo un desperdicio. Lee el envoltorio para conocer la cantidad recomendada. Si usas demasiada pasta, obtendrás una falsa sensación de haber logrado una mejor higiene, lo que podría llevarte a pasar por alto ciertas partes de la boca.
Por las mañanas, normalmente tenemos mucha prisa como para dedicarle demasiado tiempo al cepillado de dientes. Sin embargo, una buena sesión de cepillado no requiere más de dos o tres minutos. En este tiempo, podrás deshacerte con facilidad de cualquier resto de comida en la boca y prevenir así la acumulación de sarro.
El hilo dental es una herramienta que no debes pasar por alto. De acuerdo con las organizaciones dentales, si no lo usas, estás descuidando una tercera parte de la superficie de los dientes. Al usar hilo dental todos los días, evitarás la formación de sarro.
Es importante que no restriegues los dientes como si estuvieras lavando una papa. Se recomienda que frotes suavemente desde arriba hacia abajo, con movimientos circulares.
Cuando sonreímos, solo enseñamos la parte frontal de nuestros dientes. Esto no significa, no obstante, que debamos ignorar los dientes que están más atrás cuando nos cepillamos. Para lograr un cepillado eficaz, deben tenerse en cuenta todos los dientes. De esta manera, podrías evitar futuras visitas al dentista potencialmente dolorosas
Cada boca es diferente, y el mismo cepillo no necesariamente será apropiado para todo el mundo. Puede que tu cepillo sea muy pequeño o muy grande para ti, lo que podría impedir que llegues a todos los dientes o, incluso, podría dañarlos. En tu próxima visita al dentista, pídele ayuda para escoger tu nuevo cepillo de dientes.
Fuente: MSN.com