El ácido úrico se trata de una sustancia de desecho que se forma en nuestro hígado al metabolizar las purinas, aunque también lo genera el propio organismo. Aunque una pequeña cantidad de esta sustancia es necesaria por su efecto antioxidante, el exceso, principalmente por problemas para eliminarlo correctamente a través de la orina, puede generar serios problemas.

La hiperuricemia aumenta el riesgo de que se formen cristales de urato monosódico en las articulaciones o en los tejidos blancos, es decir, lo que comúmente se conoce como ‘gota’. Además, según algunos estudios, el aumento mantenido de ácido úrico produce enfermedad renal y, a la larga, daño vascular. La ‘gota’ está igualmente relacionada con la diabetes, la obesidad y la arterioesclerosis.

Por todo ello es importante tomar ciertas medidas de prevención.

– Dieta: limita la ingesta de carnes rojas, los embutidos, las sardinas, las vísceras, las legumbres, el alcohol y los vegetales como los guistantes, las espinacas, los espárragos o la coliflor. Es importante, además, evitar el exceso de peso, por lo que, aunque sean bajos en purinas, hay que evitar el excesivo consumo de alimentos más calóricos.

– Medicamentos: determinados fármacos como los diuréticos, algunos laxantes y los derivados del ácido acetilsalicílico pueden elevar los niveles. Por ello es importante que consultes con tu médico antes de tomarlos.

Fuente: salud.facilisimo.com