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Combate el miedo a la oscuridad de los niños

Little girl having childhood nightmares

Muchos niños tienen miedo por las noches, justo antes de dormir. Les da miedo quedarse solos, les da miedo la oscuridad… El origen inmediato del miedo de los niños puede estar en un cuento, una película o un hecho ordinario que, por algún motivo, ha impresionado al niño.

Se ha apuntado que, en el fondo del miedo infantil a la oscuridad o en general de los miedos nocturnos de los niños, siempre subyace el mismo temor: el miedo a ser abandonado por las personas más importantes en la vida de los niños, los padres. Por esodebemos tomarnos en serio el miedo de nuestro hijo.

Castigar o amenazar a nuestro hijo cuando no pueda dormir no le ayudará a vencer su miedo. A lo sumo, aprenderá a esconderlo mejor, lo cual le distanciará de nosotros. Ridiculizar su miedo minará su confianza en sí mismo y no le ayudará a dormir mejor.

Lo mejor es reconocer el sentimiento del niño y ayudarle a entender su propio sentimiento. Para ello lo más eficaz es ponerle nombre, diciendo, por ejemplo: «lloras y no te quieres dormir porque tienes miedo, pero no te preocupes».

 

Si nos interesamos y escuchamos con atención, asintiendo con la cabeza, a lo que nos cuenta de su miedo le ayudaremos a superarlo. Una frase como «me gustaría ayudarte a superar ese miedo» o bien «¿Cómo puedo yo ayudarte?» contribuye a mejorar el clima, a relajar al niño.

  • Un poco de magia: «Si yo tuviera una varita mágica… ahora mismo te quitaría el miedo; lo haría papilla y dormiríamos todos felices. Pero solo tengo besos mágicos: ¡Te daré un montón!»
  • Magia y muñecos: «Traspasa los poderes» a uno de los muñecos favoritos de tu hijo. No hay que tener miedo a usar un poco la fantasía, los niños no se confunden tan fácilmente. Lo que cuenta para un niño es que le estás ayudando a superar su miedo.
  • Por adelantado: Asegúrale que acudiréis a su lado si llama, tantas veces como haga falta.
  • Anímale a ser valiente: Pídele con un guiño que, si tiene miedo, llame primero al muñeco; pues los papás están «un poco cansados hoy» y a lo mejor no oyen a la primera.

Fuente: elbebe.com