El cerebro es muy sensible y en la medida que se aprenden cosas nuevas, hace falta reparar y construir nuevas conexiones entre las células. Para que el cerebro tenga una buena salud general, necesita de una dieta balanceada, rica en frutas y vegetales frescos.
Además, necesita de un suministro estable de energía que sólo se puede obtener con glucosa obtenida de los carbohidratos «buenos» , provenientes del pan integral, la pasta, la avena y las legumbres.
Es importante recordar, la necesidad de no saltarse el desayuno ni el almuerzo, especialmente si ese día tiene se tiene un examen importante porque se tendrá un bajo desempeño si ha pasado mucho tiempo desde la última comida sana. Sin dejar de lado una adecuada hidratación, en caso de estar deshidratada el desempeño no sera óptimo.
Es esencial que el cuerpo esté en movimiento para que se bombee por todas partes una sangre rica en oxígeno. Esto ayudará a mejorar la capacidad de nemotecnia, mientras que la ausencia contribuye al envejecimiento prematuro del cerebro.
El sueño es la manera más practica de que esta parte del organismo inicie los trabajos de reparación y consolidación de todo el aprendizaje del día. Incluso hay expertos que recomiendan hacerlo tan pronto como sea posible después de una jornada de estudios o preparación.
Fuente: M.bbc.co.uk