La ganadora del título Miss Universo 2017, la sudafricana Demi-Leigh Nel-Peter, ha sido muy criticada en la redes sociales por una fotografía que publicó, en julio de este año, en su cuenta de Instagram.
En la imagen, Demi Leigh se ve usando guantes de látex durante su visita en un orfanato, donde la mayoría de los niños que viven ahí son de raza negra y tienen VIH.
Muchos internautas la acusaran de racismo y la criticaron fuertemente, ya que como es sabido, el VIH no se contagia por el contacto físico casual.
En su defensa, la actual reina de belleza ha dicho: “Estábamos trabajando con comida y con niños. El único motivo que tuve para ponerme los guantes era ser lo más higiénica posible. Mi motivación ha sido malentendida. Estoy triste de que se haya tergiversado. Espero que puedan ver lo que de verdad hay en mi corazón”, según publica elpais.es.
