Si supieras lo fácil que es eliminar la celulitis, no la tendrías. Lamentablemente, existe toda una moda creada en base a esta situación, que propone ir de un método a otro, creando más frustración; sigues al pie de la letra lo sostenido y no funciona. Lo cierto es que algunas personas tienen más tendencia a producir celulitis que otras. Pero, independientemente de tu herencia, puedes deshacerte de ella y tener una piel tersa.
La base radica en los alimentos que seleccionas. No existe un alimento bueno o malo, sino combinaciones y límites a los consumos de cada uno de ellos para evitar que se forme.
Alimentos que pueden producir más celulitis:
- Costillas de res o cerdo
- Vísceras, como hígado, riñones, salchichas altas en grasa
- Pierna de pollo, pavo o cerdo
- Picaña
- Pasteles
- Mayonesa
- Salsas envasadas
- Papas fritas
Si los combinas con arroz, puré de papa, zanahoria o yuca, choclo molido o verde majado, la capacidad de producir inflamación del tejido subcutáneo, también conocido como celulitis, se maximiza. Los helados y el chocolate te alejan más de una piel radiante.
Hay pequeños conceptos que debes aprender a manejar, como la cantidad justa de alimentos para ti, que la calculas en base a tu tamaño, nivel de actividad física y horarios en que sería ideal que comieras.
Esos conocimientos permiten la perfección, pero ésta empieza si realizas las siguientes acciones:
1) Toma de seis a ocho vasos al día de agua mineral rica en magnesio.
2) Asegúrate de que tus comidas sean hechas solo con aceite de oliva, y procura agregar no más de una cucharada por comida.
3) Selecciona pulpo, calamar, camarón, pescados, pechuga de pollo o pavo. Limita la carne vacuna a dos veces por semana y siempre escogiendo cortes bajos en grasa.
4) Todas tus comidas deben aportar al menos tres tazas de vegetales (pueden ser en sopas o ensaladas).
5) Jamás hagas dietas muy bajas en carbohidratos.
6) Al menos cuatro cucharadas de lenteja o frejol negro cocinado, o seis de garbanzo, te asegurarán no caer en un almuerzo o cena demasiado baja en carbohidratos.
7) Todo almuerzo o cena debe aportar al menos media taza de fruta.
8) Cuando tengas antojos de chocolate, asegúrate de que sea ochenta y cinco por ciento de cacao, y limita su consumo al tamaño de la cédula de identidad.
8) No olvides lo importante que es mantener el balance de macronutrientes (carbohidratos-proteínas-grasas) en los snacks de media mañana y media tarde. El pan de la dieta de la zona es una opción práctica aconsejable.
9) Practica al menos treinta minutos de ejercicio tres veces por semana.
10) Aprende a meditar y procura hacerlo diez minutos al día. Este consejo te parecerá fuera de contexto pero, aunque te parezca mentira, es de gran importancia.
Si te ves en la necesidad de comer muchas veces fuera de casa, donde no tienes control sobre lo que usan para tus comidas, hay una forma para neutralizar el efecto y puedo enseñártela en un próximo artículo.
Fuente: Revista Mariela