Después de una dieta exitosa, muchas personas se desalientan al ver rebotar su peso y los científicos están averiguando por qué.
Microbios en el intestino están involucrados en el efecto «yo-yo» (subir y bajar de peso) en la que las personas que hacen dieta pierden peso que fácilmente regresa, según un estudio de laboratorio realizado por investigadores del Instituto de Ciencias Weizmann.
La investigación en ratones, publicada en la prestigiosa revista científica _Nature_, podría ayudar en el futuro a mantener el peso, según el doctor Eran Elinav del departamento de inmunología y el Prof. Eran Segal, del departamento de informática y matemáticas aplicadas.
Después de una dieta acertada, mucha gente se desalienta al ver rebotar su peso, este es un fenómeno demasiado común llamado efecto «recurrente» o «yo-yo». Aún peor es que la gran mayoría de los individuos con obesidad recurrente no sólo recuperan su peso anterior sino que además ganan más peso con cada ciclo de dieta.
Durante cada ronda de dieta y recuperación de peso, su proporción de grasa corporal aumenta, al igual que el riesgo de desarrollar las manifestaciones del síndrome metabólico, incluyendo la diabetes de adultos, el hígado graso y otras enfermedades relacionadas con la obesidad.
Los investigadores del instituto Rehovot demostraron que los microbios intestinales – denominados colectivamente micro bioma del intestino – juegan un papel inesperadamente importante en el aumento de peso
exacerbado después de la dieta y que este fenómeno común puede prevenirse o tratarse en el futuro alterando la composición o función del micro bioma.
Los investigadores descubrieron que después de un ciclo de ganar y perder peso, todos los sistemas del cuerpo de los ratones completamente revertido a normal – excepto el micro bioma, que permaneció anormal durante unos seis meses después de perder peso.
«Hemos demostrado en ratones obesos que después de una dieta exitosa y la pérdida de peso, el micro bioma conserva una «memoria» de la obesidad anterior», dijo Elinav. «Este micro bioma persistente aceleró la recuperación de peso cuando los ratones fueron puestos de nuevo en una dieta alta en calorías o comieron alimentos regulares en cantidades excesivas».
El estudio fue dirigido por el estudiante de doctorado Christoph Thaiss, trabajando en el laboratorio de Elinav, quien colaboró con el estudiante de maestría Shlomik Itav, la estudiante de doctorado Daphna Rothschild del laboratorio de Segal, así como con otros científicos de Weizmann y otros lugares.
La obesidad recurrente es una epidemia de proporciones masivas, en cada sentido de la palabra, dijo Elinav.
«La obesidad afecta a casi a la mitad de la población adulta del mundo y predispone a las personas a complicaciones comunes que pueden poner en riesgo la vida, como diabetes y enfermedad cardíaca en adultos», dijo.
«Si los resultados de nuestros estudios con ratones resultan ser aplicables a los seres humanos, pueden ayudar a diagnosticar y tratar la obesidad recurrente, y esto, a su vez, puede ayudar a aliviar la epidemia de obesidad».