Jennifer Aniston no había dado ninguna entrevista importante desde que anunciara su separación amistosa de Justin Theroux hace cinco meses. Hasta ahora. En la edición de septiembre de InStyle, la coguionista en jefe de Jimmy Kimmel Live!, Molly McNearney, su amiga desde hace seis años, comenzó la entrevista con preguntas bien osadas. «Quiero comenzar esta entrevista de forma ligera. ¿Cuándo vas a regresar con [Brad Pitt]? ¿Justin alguna vez usó tus pantalones?», le preguntó. «¿Cuándo tendrás mellizos?».

Entre risas, Aniston le respondió, «Eres la única persona que puede empezar una entrevista así y darme risa y no urticaria». La actriz ha sido objetivo de los tabloides desde que Friends comenzara a transmitirse en los 90s, a pesar de que McNearney dice que se ha mantenido «sobria y equilibrada» durante todo este tiempo. «Definitivamente hay momentos en los que no ha habido balance ni sobriedad, pero todo eso lo hago en mi espacio personal», dijo Aniston. «Durante la mayoría del tiempo me siento y me río de los titulares ridículos, porque se han vuelto más y más absurdos. Me imagino que alimentan cierta necesidad que tiene el público, pero me concentro en mi trabajo, mis amigos, mis animales, y en cómo podemos hacer del mundo un lugar mejor. Las otras cosas son comida basura que necesita regresar a su cajón».

Cuando le pidieron que señalara la «idea más equivocada» que tienen de ella, Aniston respondió, «Oh, cielos, hay tantas. Veamos. Simplemente me buscaré en Google y lo descubriremos… Oh, miren, ¡me haré un cambio de imagen en venganza, valorado en 100 mil dólares!». Las interminables historias de tabloides pueden ser «muy locas», le dice a McNearney. «Las ideas equivocadas van desde ‘Jen no sabe cómo quedarse con un hombre’ a ‘Jen se niega a tener un bebé porque es egoísta y está comprometida con su carrera’. O que estoy triste y con el corazón roto. Primero que nada, con el debido respeto, no tengo el corazón roto. Segundo, esas son cosas que asumen equivocadamente. Nadie sabe qué pasa a puertas cerradas. Nadie toma en consideración qué tan delicado es eso para mi pareja y para mí. No saben por lo que he pasado ni médica ni emocionalmente. Hay una presión sobre las mujeres para ser madres y, si no lo son, las califican como rotas. Quizás mi propósito en este planeta no sea procrear. ¿Quizás hay otras cosas que debería hacer?».

McNearney también le preguntó en la entrevista, «¿Alguna vez quisiste golpear a alguien?».

«Ok, seamos honestas. He tenido momentos en que lo he querido hacer, pero es una fantasía, está en tu cabeza», dijo Aniston. «Nunca lo haría». Dicho esto, ve algo importante en el hecho de liberar la furia. «Boxear es una gran manera de sacar tu agresividad. Puedes liberar tu mente y toda la basura que soportas en tus oídos y en tus ojos. Puedes tener pequeños momentos de fantasía en que te imaginas a quién estás golpeando. Estoy agradecida de que no sea la persona en la realidad, a pesar de que sí te imaginas a una persona», dijo Aniston. «Sabes a lo que me refiero. Todo está bien».

¿Qué es lo próximo para la novia de América?

«Han habido momentos en que me encantaría escapar de todo y mudarme a Suiza, a algún lugar donde se pueda comenzar de cero», admitió la actriz actualmente residenciada en California. «Dejar toda la m**rda atrás. ¿Acaso es importante? ¿De verdad hacemos algo? ¿Cuál es el propósito de mi vida? Cada siete años hago recuento de mis cosas y de lo que quiero que sea mi foco. Intento tomar mejores decisiones. Pasé por un periodo de decirle que sí a proyectos que no debí aceptar, pero pensaba, ‘¿Cómo atreverme a decir que no?’. Ahora intento mejorar en cómo decir que no y ser parte de proyectos que realmente importan como Dumplin’ o The Goree Girls o esta película en la que estamos trabajando llamada The Fixer, sobre una impresionante gerente de crisis llamada Denise White».

Aniston no tiene ningún plan de retirarse del negocio del espectáculo. «Estoy agradecida de que la gente todavía me invite a la fiesta. Siempre querré seguir actuando mientras que tenga deseo de hacerlo», dijo. «Mientras otras cosas me llenen creativamente, espiritualmente y esas otras cosas, sé que puedo seguir haciendo esto hasta que me pongan en una casa de retiro».