Jennifer Lawrence salía del Aeropuerto de Los Ángeles con su perrita Pippi , cuando fue asediada por varios fotógrafos, que le preguntaban sobre el reciente incidente aéreo donde su avión privado tuvo que aterrizar de emergencia por una falla de motores.

La actriz no quiso responder las preguntas y caminó rápidamente hacia su auto.

Uno de los paparazzi de TMZ.com, al ver que la actriz no respondería preguntas, decidió acercarse a Pippi y acariciarla.

Lawrence se agachó para recoger a su mascota e inmediatamente le dijo: “No toques a mi perro, maldito perdedor”.

Los ahí presentes quedaron casi sin reacción ante la actitud grosera de la actriz.

Fuente: labotana