La actriz y empresaria se ha abierto sobre su batalla contra el alcohol y las drogas en su nuevo libro, Open Book.
Jessica Simpson se ha abierto sobre su batalla contra el alcohol y las drogas que amenazaron su vida, en su nuevo libro de memorias titulado, Open Book.
La cantante admite que se automedicó con alcohol y estimulantes después de un período de trauma, que comenzó con el abuso sexual que sufrió cuando era niña. Sin embargo, la dependencia a las sustancias, más tarde llevó a su médico a decirle que su vida estaba en peligro.
“Me estaba matando con toda la bebida y las píldoras”, escribe en nuevos extractos de la publicación, obtenidos por People.
“Dejar el alcohol fue fácil”, confiesa la estrella, que ha estado sobria desde noviembre de 2017. “Estaba enojada con esa botella. Por cómo me permitió permanecer complaciente y adormecida ”.
Pero fue la terapia con la que luchó la estrella, escribiendo: “Con el trabajo, me permití sentir los traumas por los que había pasado”.
El abuso comenzó cuando tenía seis años, “cuando compartí una cama con la hija de un amigo de la familia”, recuerda. “Comenzaría con cosquillas en la espalda y luego entraría en cosas que eran extremadamente incómodas”.
La estrella de With You admite que “quería decírselo a mis padres”, pero temía que la culparan, y escribió: “Yo fui la víctima, pero de alguna manera me sentía culpable”.
Cuando tenía 12 años, les dijo a sus padres, Tina y Joe, mientras viajaban en automóvil. Jessica dice que su madre le dio una palmada en el brazo a su padre y le gritó: “Te dije que algo estaba pasando”.
“Papá mantuvo la vista en la carretera y no dijo nada”, agrega Simpson. “Nunca más nos quedamos en casa de los amigos de mis padres, pero tampoco hablamos de lo que dije”.
Simpson continúa recordando que finalmente tocó fondo después de una fiesta de Halloween en 2017, y admitió: “Cuando finalmente dije que necesitaba ayuda, fue como si fuera esa niña que encontró su vocación nuevamente en la vida”.
Fuente: La Botana