En un momento complicado para su carrera y reputación, Johnny Depp ha sido recibido con los brazos abiertos en la Mostra de Venecia en la que hoy presenta «Waiting for the barbarians», una alegoría sobre el peligro de incentivar el miedo al extranjero.
El actor estadounidense se encuentra en la isla del Lido, que ha amanecido azotada por un fuerte viento y lluvias. Anoche Depp asistió en el Centurion Palace de Venecia a una cena de honor dedicada al equipo del filme, la primera producción en inglés del colombiano Ciro Guerra.
En ella, Depp vuelve a ponerse en la piel de un villano, después de la experiencia como el Grindelwald de la saga «Animales fantásticos».
El intérprete de Jack Sparrow atravesó una tormentosa etapa personal y una crisis en su imagen pública a raíz de su separación, en 2017, de la actriz Amber Heard, en lo que supuso el comienzo de una espiral de juicios y cruces de acusaciones de malos tratos que se sumaron a sus problemas con el alcohol y las deudas, según él mismo contó a la revista Rolling Stone.
«Waiting for the barbarians», en la que comparte protagonismo con Mark Rylance y Robert Pattinson, está basada en una novela del Nobel de Literatura J.M. Coetzee que describe los avatares de un ejército colonial en territorio extranjero, una historia inspirada en la Sudáfrica del «apartheid» pero situada en época y lugar indefinidos.
En medio de la demanda millonaria de Amber Heard a su ex esposo Johnny Depp, salió a la luz el nombre del también actor James Franco, quien podría ser clave fundamental en el pleito legal que inició en 2016 por violencia doméstica.
Todo comenzó cuando la estrella de la cinta «Aquaman» solicitó el divorcio en 2016 alegando «diferencias irreconciliables», posteriormente salió a la luz un video y fotografías de la supuesta violencia que vivió en los dos años de matrimonio con Depp.
El actor respondió diciendo que todo fue planeado por la joven de 33 años, a quien acusó de manipular las fotografías con maquillaje para obtener publicidad, iniciando con ello una gran batalla mediática.
Cabe recordar la extensa carta publicada por el diario The Washington Post, en donde Heard narró los episodios de violencia que sufrió. Tras la publicación, el protagonista de «Piratas del Caribe» contrademandó por difamación.
El nombre de James Franco salió a la luz como una prueba ante la justicia de que el ex de Winona Ryder no fue quien realizó las lesiones por las que se le acusan. De acuerdo con los abogados de Johnny Depp, existe una grabación de seguridad que registró el encuentro de Franco y Heard un par de horas después de la supuesta golpiza.
Page Six aseguró que el video tomado al interior de un ascensor fue registrado el 22 de mayo de 2016. En las imágenes se observa a la actriz bajar al estacionamiento y después volver acompañada del que en ese momento era su compañero de rodaje, el actor James Franco, quienes intentaron ocultar su rostro de la cámara.
Erick M. George, representante legal de Heard, comentó para E! News que, aunque se haya mandado la citación a Franco, el video de los dos es completamente «irrelevante».
Sin embargo, la abogada del acusado aseguró en una entrevista para The Blast que están interesados en James Franco y el fundador de la compañía automotriz Tesla, Elon Musk, como testigos del hecho, ya que los dos hombres podrían confirmar el estado en el que se encontraba el rostro de Heard, ya que en ese tiempo declaró que fue maltratada por su entonces esposo.
Elon Musk fue citado ya que el acusado declaró que su ex esposa le fue infiel con el líder de la empresa ubicada en Silicon Valley. De acuerdo con las declaraciones del acusado y sus abogados, el alegato legal forma parte de una estrategia para que la actriz tuviera publicidad y avanzara en su carrera.
Fuente: InfoBae
