LIBROS FÍSICOS VERSUS ELECTRÓNICOS
PARA ALGUNOS LA LECTURA ES EL CAMINO HACIA EL CONOCIMIENTO Y LA LIBERTAD; PARA OTROS ES, SIMPLEMENTE, UN PLACER. LO QUE ESTÁ CLARO ES QUE NOS AYUDA A COMPRENDER MEJOR EL MUNDO Y A NOSOTROS MISMOS, YA SEA EN PAPEL O EN FORMATO DIGITAL.
Las nuevas tecnologías abren una nueva brecha y le dan un nuevo rostro a la portada de un libro. Lo que antes era cosido, con tapa dura, letras llamativas y un lomo que permitía ubicarlo fácilmente en un estante, ha dado paso a encender un computador o un artefacto eléctrico portátil, hacer clic y recurrir al título que queremos comprar, para comenzar a leerlo en una pantalla.
Hojear páginas que podían estar dobladas o con alguna marca para saber en qué punto se quedó el lector, no es cosa del pasado. Pero bien puede sustituirse por un botón de teclado que, además brinde la opción de recurrir inmediatamente a una fuente o a una traducción de algo que no se comprende a primera vista.
¿PÁGINAS O PANTALLAS?
Tal parece que el primer libro que se leyó en la pantalla de un computador, sólo fue la simple transcripción de uno impreso. Pero ahora, no se habla únicamente de un cambio de formato, sino de un universo paralelo a un clic del lector. Más allá de la simple historia lineal, a la cual estamos acostumbrados en el papel, existe una infinidad de opciones que pueden revisarse leyendo un libro electrónico. Con la facultad de añadir a la experiencia de la lectura: video, imagen, animación, sonido y vínculos, que va mucho más allá de los clásicos pies de página y bibliografías.
Sin embargo esto no implica la muerte del libro en papel. Éste siempre existirá y, en opinión de Raiza Ramírez, psicóloga y comunicadora social, lo importante del formato es la manera con la cual cada individuo haga un contacto más directo y placentero con el mundo. De modo que, para quien el tacto es lo primordial, quizá le sea importante tener el libro en sus manos, para hojearlo y sentir su textura, también pudiera ser la opción de una pantalla táctil. Para los auditivos, el audiolibro sería el adecuado. Para los visuales, las imágenes de una pantalla, podrían ser ideales.
Los monitores actuales son cada vez más amplios y nítidos, además de ofrecer una inmensa gama de colores y tamaño de fuentes ajustable, en contraposición a la rígida hoja de papel monocromática y pesada, reducida a un formato único.
El obstáculo es la necesidad de un computador, la conexión a Internet y la energía eléctrica o baterías; sin embargo, cada día esta herramienta se ha ido masificando y volviéndose más compacta y portátil, como el iPod, los iPads, el AmazonKindle, el Sony Reader, el Nook, las minilaptops, las laptops y los pen drives que, a pesar de su alto costo en alguno de los casos, han contribuido a hacer más amigable la lectura digital.
CAMBIO DE PARADIGMA
Las nuevas tecnologías, comenzaron siendo vistas como un invasor que surgió para eliminar la manera tradicional de hacer las cosas, pero la realidad es otra. Cuando se introdujo el primer cajero electrónico fue visto con rechazo, y hoy en día es uno de los artefactos más utilizados en el mundo.
Con el libro electrónico ocurre lo mismo. Los amantes del papel, los ecologistas y los fanáticos de las ediciones impresas se han unido en contra del nuevo formato, apelando al consumo de energía, a lo costoso de los equipos y a los problemas con la banda ancha y la rapidez en las conexiones. Pero la historia ha demostrado que los grandes cambios siempre generan rechazo.
La lectura electrónica está en plena efervescencia, tanto así, que en el primer cuarto de 2010, las ventas han ascendido a 1.43 millones de unidades en todo el mundo. Esto sin contar que Google, líder en búsqueda en la red, se lanzará al mercado de las ventas de los libros electrónicos para seguir llenando los anaqueles del ciberespacio.
Fuente: EstéticaySalud