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Mitos sobre la relación entre padres y adolescentes

5 Mitos sobre la relación entre padres y adolescentes

La relación entre padres y adolescentes siempre resulta un desafío porque ellos están cambiando su forma de pensar y están comenzando a conocer el mundo desde otra perspectiva. Sin embargo, no hay nada que complique más una buena relación con tu hijo adolescente que la generalización, los estereotipos y los mitos sobre cómo debe comportarse un padre de un hijo adolescente.

1.-Es necesario que sea amiga de mi hijo adolescente
Sé que puede resultar duro ver que ese pequeño que solo pedía por Mamá, ahora está formando nuevos lazos fuera de casa y ya no depende de una como solía hacerlo. Muchas madres podemos confundirnos y pensar que si pasamos del rol de madre al rol de amiga, podremos tener una relación saludable de madre e hijo, pero no es así. Esta es la etapa en la que ellos comienzan a formar su sentido de la identidad e independencia y necesitan tener amigos, pero también padres que los guíen y establezcan límites.

2.-Mi hijo adolescente siempre me miente
Puede ser que algunas veces mientan, entonces deberíamos preguntarnos, ¿por qué lo hacen? No es que tu hijo mienta todo el tiempo, sino que considera que al decir la verdad no podrá conseguir lo que quiere. Lo mejor para evitar la mentira, sin convertirte en la «mejor amiga» de tu hijo, es abrir las puertas a la comunicación con los hijos antes de que sea demasiado tarde. Pídele que confíe en ti y trata de confiar en él.

3.-Soy su madre y debo saberlo todo
¡Falso! Sí, eres su madre, y sí, es bueno que logres una comunicación conveniente con él, pero es saludable que los adolescentes comiencen a tener ciertos secretos propios, como los tenemos todos, ¿verdad? La privacidad es un aspecto muy importante para la generación de identidad e independencia; por eso, no es necesario que sepas qué hace en cada momento, qué piensa o qué siente.

4.-Si no lo controlo todo el tiempo ahora, luego me arrepentiré
Puede ser que te arrepientas, pero quizás no sea por no controlarlo, sino por perderte valiosos años de tener una relación linda y saludable con tu hijo porque te empecinas solo en controlarlo. El control excesivo de los padres no es el camino adecuado para tener una buena relación con los hijos; trata de encontrar un balance. Eres su madre y quieres protegerlo, y él necesita que estés atenta, pero también deberías dejarlo que se exponga a la libertad, que caiga y se levante para poder aprender.

5.-Mi hijo adolescente nunca quiere pasar tiempo conmigo
¡Claro que quiere pasar tiempo contigo! Es normal que te sientas un poco desplazada en esta nueva etapa en la que ya no eres la luz total de sus ojos, créeme, a todas nos pasa; pero eso no quiere decir que no quiera pasar tiempo contigo, solo que quiere hacerlo cuando quiere hacerlo. Muchos adolescentes desearían poder tener más diálogo con los padres y desean poder llevarse mejor.

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Fuente:www.imujer.com

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