Por una denuncia telefónica, la policía de Los Ángeles irrumpió en la mansión de Kim Kardashian y Kanye West, tras recibir una llamada anónima en la que se aseguraba que ese lugar había sido escenario de un crimen, informó TMZ.com.
Se denunció que un hombre que merodeaba la zona recibió un disparo, así como también que una sirvienta que se encontraba dentro de la casa había sido asesinada a tiros por un desconocido.
Todo un despliegue policiaco llegó al lugar, y en ese momento la persona que hizo la denuncia telefónica cortó la llamada, según se publicó en un Twitter de la cuenta de la Asociación de Monitoreo del Sur de California.
Cuando la policía entró a la casa de Kim y West, en ésta no se encontraba nadie. Son frecuentes ese tipo de llamadas anónimas, y así ha ocurrido en la casa de varios famosos tras denuncias que luego resultan falsas.
Fuente: labotana.com