Los últimos reportes aseguran que así fue como los ex cerraron un largo ciclo.
De acuerdo con Vanity Fair, Chelsy Davy tuvo una llorosa llamada con su ex, el príncipe Harry, durante la semana de su boda con Meghan Markle.
«Fue su llamada final, una llamada de despedida en que los dos aceptaron que Harry seguiría adelante», le dijo «un amigo de la familia» a la revista. «Chelsy reaccionó muy emotivamente, estaba en lágrimas y casi no va a la boda. Al final sí fue y le prometió a Harry que no arruinaría la fiesta».
Davy lució muy relajada cuando llegó a la Capilla de St. George el 19 de mayo.
Usó un vestido azul con un tocado a juego.
«Asistir [a la boda] de un ex no es fácil», le contó la estilista de moda, Sadaf Razi, a E! News. «Ella lució muy apropiada en azul marino y me encantaron sus mangas. Lució joven, pero muy chic».
Después de la ceremonia, 6oo invitados asistieron a una recepción de almuerzo, organizada por la reina Isabel II en St. George’s Hall. Vanity Fair informó que Davy no fue invitada a la recepción privada en Frogmore House, organizada por el príncipe Carlos, para los 200 amigos y familiares más cercanos a Meghan y Harry.
Harry y Meghan han estado juntos menos de dos años, pero una fuente le dijo a E! News que él «supo inmediatamente» que ella era la correcta.
«Harry no sintió ese tipo de chispa ni con Chelsy», agregó la fuente. «¡Y ellos estuvieron juntos por años! Harry supo inmediatamente, desde el momento en que pasó tiempo con Meghan, que quería estar con ella. Es un caso sencillo de conocer a la chica correcta en el momento correcto».
Fuente: E-News!
