Luego de haber dejado sus andanzas de chico malo atrás, el príncipe Harry finalmente inició una relación con quien parece perfilarse como su futura esposa: Meghan Markle.

Pero, como hemos aprendido durante todo este tiempo, y gracias a las sabias enseñanzas de The Royals, absolutamente nada puede pasar en la familia real sin la aprobación de la reina. Eso, naturalmente incluye bodas, es decir, la inclusión de alguien dentro de la monarquía.

A pesar de nuestro amor por Harry, no quisiéramos estar hoy en los zapatos de Meghan, ya que se prepara para finalmente conocer ser evaluada  a la reina Isabel.

Según detalla Vanity Fair, algunos medios de comunicación ingleses indican que el próximo 26 de marzo, Día de la Madre que en Reino Unido, se celebra el encuentro «no oficial» que para muchos es la última prueba de la pareja antes de pensar en boda.

¿Cómo es el panorama para la novia?

«La reina está encantada de ver a Harry en una relación tan bonita y por eso apoya totalmente el noviazgo», reporta US Weekly.

La introducción de la actriz de Suits en la corte británica se ha estado haciendo poco a poco. Primero recibió el visto bueno de la duquesa de Kate Middleron en Kensington; después, de la pequeña princesa Charlotte, con la que estuvo jugando, y semanas más tarde coincidió en Balmoral con el que será su suegro, el príncipe Carlos, cuando se reunieron todos con motivo del 32 cumpleaños de Harry.

Igualmente, no se trata de un camino corto, ya que por ejemplo, a Kate tuvo que esperar 5 años para finalmente ser miembro oficial de la realeza.

Fuente: E!