Las mascarillas para el cabello son una excelente forma de mantenerlo sano y sin puntas abiertas, pero no todas tienen el mismo tipo de cabello, por lo que algunos aceites te pueden funcionar mejor que otros.
Cabello grueso y muy reseco – aceite de oliva.
Cualquier tipo de cabello propenso a caspa – aceite de coco.
Cabello graso y delgado – aceite de castor.
Cabello dañado – aceite de aguacate.
Una vez que selecciones tu aceite sigue los siguientes pasos para una mascarilla perfecta:
1. Calienta el aceite a baño maría (asegúrate de que no quede muy caliente).
2. Divide tu cabello en secciones (mientras más grueso lo tengas, usa más secciones).
3. Masajea tu cuero cabelludo con el aceite y distribúyelo hasta las puntas con la ayuda de un peine.
4. Cubre todo el cabello con una gorra de baño.
5. Coloca una toalla en forma de turbante sobre la gorra (de preferencia caliéntala en la secadora).
6. Lava bien tu cabello después de 30 minutos.
Esto lo puedes hacer una vez al mes.
Fuente: actitudfem.com