El sangrado en cualquier parte del cuerpo se trata de un síntoma detrás del cual se oculta una afección. Uno de los sangrados más comunes se presenta en la boca.
Falta de higiene bucal
Luego de 36 horas de no cepillarte los dientes de forma adecuada, puede comenzar a desarrollarse el proceso que desencadenará el sangrado de encías. Por eso es vital cepillarse los dientes 3 veces por día y utilizar hilo dental.
Mala alimentación
Si no te nutres de forma correcta, entonces los tejidos blandos de la boca se tornaran débiles, corriendo más riesgos de padecer afecciones bucales debido a la carencia de vitaminas y nutrientes esenciales.
Fumar
Ocasiona la inflamación de las encías, lo que genera el sangrado. Además promueve la aparición de manchas en los dientes, y potencia el riesgo de desarrollar enfermedades bucales.
Estrés
Al padecer estrés de forma prolongada baja las defensas del sistema inmunitario, por lo que los tejidos de la boca se ven afectados. Se inflaman los vasos sanguíneos y disminuye la capacidad natural de curación.
Antecedentes familiares
Las personas cuyos familiares han padecido de encías sangrantes, tienen un 35% más de probabilidades de padecer de ésta y otras enfermedades bucales.
Mordida desequilibrada o torcida
Si muerdes fuera de lugar, los huesos y los apoyos naturales de la boca se ven desplazados y resentidos, con lo cual las encías también sufren las consecuencias de la fricción y por ello pueden sangrar.
Algunos medicamentos
Antes de tomar un medicamento, debes informarte sobre cuáles son los efectos secundarios de la medicación para prevenir que la enfermedad periodontal.
Embarazo
La mitad de las mujeres sufren de gingivitis, si bien es algo transitorio es necesario elevar los cuidados bucales al máximo. Si padeces de sangrado de las encías antes de embarazarte, debes comunicarlo al odontólogo para que tome las medidas oportunas y evitar problemas de salud.
Las encías son una parte imperante de la boca, sostienen las piezas dentales y por lo mismo debes estar fuerte y sana. Los hábitos de higiene recomendados, una alimentación equilibrada y visitas regulares al médico servirán de prevención.
Fuente: vivirsalud.imujer.com