En su carrera de casi cuatro décadas en cine y televisión, la actriz Sarah Jessica Parker ha trabajado con muchos de los hombres más destacados de Hollywood, entre ellos Steve Martin, Nicolas Cage, Johnny Depp, Jack Nicholson, Hugh Grant, Matthew McConaughey y Alec Baldwin.

La estrella de Sex and the City, de 54 años, también ha lidiado con innumerables situaciones en las que los hombres se comportaron inapropiadamente con ella, según reveló en una reciente entrevista en el programa»Fresh Air» de NPR. Eso incluye a una «gran estrella de cine», quien le hizo comentarios sobre su cuerpo y fomentó que otras personas en el set le dijeran cosas degradantes.

Cansada, la actriz habló con su agente y le hizo saber lo que estaba ocurriendo en el set con este reconocido actor, de quien no reveló la identidad, o el nombre del proyecto. «Tenía todo el derecho de decir: ‘Esto es inapropiado'». 

Parker dijo que el comportamiento era lo suficientemente grave y que claramente «cruzaba todos los límites».  Estaba convencida de que el actor no iba a detenerse. «Fui a mi agente, porque sentí que ya no podía transmitir lo incómoda que me estaba haciendo eso, lo inapropiado que era».

A las pocas horas de decirle a su representante, Parker dijo que «todo había cambiado». Recordó cómo su agente le había dicho al hombre en cuestión: «‘Si esto continúa, le he enviado un boleto de ida desde esta ciudad, donde estaba filmando, y no regresará'».

Cuando se le preguntó cómo fue su trabajo en la película tras el incidente, Parker explicó que no fue» agradable». «Pero ya no tuve que ser tímida y temer una conversación potencial», agregó. «No tuve que escuchar chistes sobre mí o mi figura o sobre lo que la gente pensaba que podían convencerme para que hiciera. Eso se detuvo».

Parker relató que vivió esas traumáticas experiencias cuando comenzó su carrera como joven actriz de televisión a principios de la década de 1980 y tuvo que lidiar con hombres con poder. En ese entonces, admitió que no reconoció el accionar inapropiado de sus colegas como problemático o que sintió que tenía el poder de decir «no».

Para protegerse, Parker dijo que actuaba tímidamente o celebraba los comentarios desagradables de sus colegas masculino. También hacía todo lo posible para evitar hablar con sus acosadores en cualquier situación fuera del trabajo. Como muchas mujeres, creía que tenía que aguantar a los hombres que la trataban de manera degradante para seguir trabajando.

Pero Parker, quien está casada con el actor Matthew Broderick, dijo que sus opiniones sobre el acoso sexual cambiaron a raíz del movimiento #MeToo, y la ayudó a darse cuenta de que tenía más poder del que pensaba.

«Hasta hace unos seis u ocho meses comencé a reconocer innumerables experiencias de hombres que se comportaron mal, de manera inapropiada, y todas las formas que había permitido para seguir trabajando«, se sinceró la actriz, quien actualmente protagoniza la serie Divorce de HBO.