Selena Gomez adelgazó bastante tras el problema de salud que la llevó a someterse este año a un trasplante de riñón.
La actriz y cantante – quien padece lupus – está en plena recuperación, siguiendo todo el tratamiento y dietas necesarias para vivir saludablemente con su nuevo órgano.
Y esa nueva dieta puede ser la responsable por su pérdida de peso.
Además de varios medicamentos que debe tomar, una persona trasplantada debe evitar los alimentos ricos en sal, embutidos, conservas o platos preparados, limitar el consumo de huevos a dos a la semana, evitar el consumo excesivo de dulces, la ingesta de café y alcohol, alimentos muy condimentados, tomar leche y derivados solo desnatados, moderar el consumo de proteínas de origen animal.
Fuente: La Botana