La lisa y llana selfie ya no el lo último en autofotografías. Una nueva tendencia asoma: las dronies. Se trata de una evolución: son videos tomados por una cámara montada en un drone (pequeña aeronave no tripulada), generalmente controlado por una de las personas que está siendo registrada por la cámara.
Al menos en un primer momento, estos «videoautorretratos» no están llamados a la masividad que tienen las selfies. Porque, por un lado, requieren de un equipamiento menos habitual y más caro: un drone. Y además, lograr contolar el drone para que la toma sea la esperada es bastante más complicado que sostener una cámara o un celular en la mano para autofotografiarse.
La norma de las primeros dronies que comenzaron a aparecer en Twitter (@dronie) y en sitios de videos online es una toma breve, que se inicia cercana de los retratados y comienza a abrirse cuando el drone toma altura y se aleja.
Fuente: clarin.com