La actriz mexicana Silvia Pinal fue dada de alta luego de pasar una semana hospitalizada por problemas en las vías respiratorias.

Fue su hijo, Luis Enrique Guzmán, quien anunció la noticia a los medios de comunicación pendientes de la salud de la diva del cine mexicano.

Guzmán explicó que Pinal continuará con su tratamiento médico en casa y por ahora no dara declaraciones a los medios.

Se espera que en los próximos días la estrella mexicana vuelva a una revisión con su médico.

«Ya quiere estar en su casa, está muy contenta, de muy buenos ánimos. Está haciendo sus terapias de respiración», explicó Guzmán en una entrevista que reprodujo Televisa Espectáculos.

La diva mexicana había sido internada por una infección en las vías respiratorias y neumonía.

Hace unos días Luis Enrique Guzmán ya había comentado que los médicos solo estaban analizando unas placas y estudios para determinar cuándo sería dada de alta la actriz.

Actualmente se transmite en México la serie biográfica de la actriz, llamada Silvia Pinal, frente a ti, en la que narró detalles de sus romances con figuras como Emilio Azcárraga Milmo «El Tigre», quien fuera el fundador de Televisa.

Pinal nació en septiembre de 1931 en Guaymas, Sonora y en los años 50 comenzó su carrera en el cine nacional al lado de figuras como Germán Valdés «Tin Tan», con quien actuó en El Rey del Barrio y La Marca del Zorrillo.

La actriz también fue la estrella en algunas producciones emblemáticas de Luis Buñuel como Viridiana, producida por su entonces esposo Gustavo Alatriste.

Con el cineasta español, Pinal también trabajó en El ángel exterminador y Simón del desierto.

La actriz además compartió créditos con otras figuras de la Época de Oro del Cine Mexicano como Pedro Infante, de quien dijo era un «amor, Pedro era muy inocente, muy ingenuo, muy ignorante. Yo nunca lo critiqué, al contrario». También recordó que en alguna ocasión le preguntó por qué no se quitaba el pantalón si estaban en la playa, a lo que él le respondió que no lo hacía porque tenía las piernas «muy flacas».

Junto a Mauricio Garcés apareció en la cinta El cuerpazo del delito, pero quizás el título más emblemático de su carrera sea la película María Isabel, que narraba la historia de una mujer indígena que trabajaba como empleada doméstica en la capital mexicana y terminaba enamorándose de un hombre rico.