El rapero de 49 años formará equipo con el copropietario de Triller Ryan Kavanaugh.
Snoop Dogg está creando una nueva liga de boxeo. El rapero de 49 años formará equipo con el copropietario de Triller Ryan Kavanaugh, el cerebro detrás del reciente regreso de Mike Tyson, en The Fight Club, un proyecto que permitirá a la estrella vivir su sueño de ser un anunciante de boxeo.
Snoop dijo de su nueva aventura: “Estamos cambiando el juego. El boxeo no va a ser el mismo y la audiencia espera un nuevo estándar. Fight Club es ese estándar”.
Esto se produjo después de que Snoop Dogg impresionara a los fanáticos del boxeo con su comentario sobre la pelea de Tyson vs. Roy Jones Jr. en Los Ángeles, refiriéndose a los luchadores como “dos de mis tíos peleando en la barbacoa familiar”.
Según los productores, en un intento por aprovechar la pelea de Tyson, ‘The Fight Club conectará a celebridades de diversos orígenes, desde estrellas de las redes sociales y atletas profesionales reconocidos por sus habilidades para celebrar a músicos y actores reconocidos, hasta otras estrellas que quieran aventurarse y entrar en el mundo del boxeo’.
El cantante de Drop It Like It’s Hot ayudará a seleccionar luchadores y artistas musicales durante la producción de eventos.
El rapero se defiende de unas escandalosas acusaciones.Drake demandó a una mujer que lo acusó, según afirma, falsamente, de haberla violado y embarazado en un encuentro de una noche. Supuestamente la mujer intentó extorsionarlo por millones de dólares.
En abril de 2017, Layla Lace dijo en las redes sociales que el rapero la embarazó y después evitó sus llamadas. Ella publicó en Instagram lo que se mostraban como intercambios de mensajes entre los dos y una foto de una prueba de embarazo hecha por un laboratorio. Ella borró su cuenta, pero después participó en el show Shade 45 de Sirius XM diciendo que estaba «100 por ciento segura» de que Drake la había embarazado. No hizo ninguna mención a abuso sexual.
El martes, Drake presentó una demanda contra Lace, y la acusó de extorsión, abuso emocional, fraude, difamación y abuso del proceso. Él alega que los dos tuvieron «sexo consensuado y con protección», después de conocerse en Manchester, Inglaterra, mientras él estaba de gira el año pasado. También aseguró, «No hay evidencia creíble de embarazo, ni ningún bebé, que podría haber nacido el otoño pasado».
«Layla Lace es una ex estríper, quien ha pasado al menos el último año y medio pensando en una estrategia para, en sus palabras, ‘¡¡¡sacarle un día libre al m**dito trasero de la megaestrella Aubrey Drake Graham!!!'», dicen los documentos. «Drake tuvo suficiente y tomó está decisión para detenerla».
Lace no ha respondido a la demanda de Drake.
Él dice en los documentos que después de su encuentro sexual, «Layla se enojó mucho con Drake por enviarla a casa en vez de permitirle continuar con él en su gira», después de lo cual el rapero se disculpó con ella por teléfono y por mensaje de texto. Dijo que ella siguió escribiéndole con intenciones de juntarse y asegura que ella creó una relación «de fantasía» con él. Dijo que después de un meses de intercambios por mensaje, dejó de responderle y, un mes después de eso, hizo la denuncia pública sobre su embarazo.
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Drake dijo en su demanda que en mayo de 2017 un abogado que supuestamente representaba a Lace contactó a su abogado y le pidió dinero por el supuesto bebé de la mujer. Drake aseguró que si el hijo era suyo lo apoyaría, pero por varias razones, entre ellas que había usado protección, era imposible que fuera suyo, por lo que necesitaría pruebas. El rapero dijo que después de varias llamadas telefónicas, Lace se negó a realizar una prueba de paternidad.
Aseguró que, un mes después, le informaron y creía que Lace había contactado a autoridades de Nueva York por primera vez alegando que él la había asaltado sexualmente durante su encuentro. El rapero dijo en su demanda que le informaron supuestamente que las autoridades remitieron eso a la policía de Manchester, quienes investigaron el asunto, lo entrevistaron después de comparecer en persona voluntariamente y que lo liberaron de toda acusación.
Drake dice en su demanda que después de que se cerrara la investigación, Lace le exigió que le pagara millones de dólares a cambio de su silencio.»Es suficiente. Con esta acción, Drake se negará a permitirle a Layla que se salga con la suya en su maliciosa estrategia para extorsionarlo por millones de dólares, con la amenaza de decir en público sus falaces (y siempre cambiantes) acusaciones de una conducta que simplemente no ocurrió», dice la demanda. «Habría sido fácil para Drake pagar por silencio. Pero Drake no quiere la salida fácil. Layla y sus abogados subestimaron la resolución de Drake de no pagar por el silencio que evitaría la publicidad negativa debido a acusaciones fabricadas. Él espera hacer responsables a Layla y sus asociados por esta atroz y mala conducta».
«Drake hubiese preferido no tener que relacionarse más con Layla de ninguna manera», continuó la demanda. «Ella hizo que eso fuera imposible con su comportamiento, así que él no tuvo más opción que exponer a Layla por lo oportunista que es y probar su caso en una corte».
Fuente: E-News!
El rapero tiene su propia habitación en la mansión de la socialite.
Kylie Jenner y Travis Scott ya empezaron a hacer planes para su boda, revela la revista In Touch Weekly.
La pareja, que dio la bienvenida a la pequeña Stormi Webster el 1 de febrero, ya está completamente acoplada a la nueva vida con la bebé en casa, según fuentes.
“Travis pasa más tiempo en la casa de Kylie, y puede quedarse más tiempo con su hija. Les está encantando esa rutina”, revela un informante.
Pero los novios no comparten la misma habitación todavía: “Travis tiene su propia habitación en la mansión, y Kylie tiene una cuna en su cuarto para la bebé, aunque en la mayoría de las veces Stormi duerme en su habitación, con una enfermera”, justifica la fuente.
Pero antes de dar el gran paso hacia el altar, Kylie y Travis están haciendo la prueba de vivir juntos bajo el mismo techo: “Por el momento está funcionando”, afirma un amigo.
Fuente: La Botana
Fuentes afirman que la cantante espera a su primer hijo con el rapero Nas…
Nicki Minaj es una vez más blanco de rumores de embarazo. Según el sitio MediaTakeOut, la rapper de 35 años está embarazada de su primer hijo con el rapero Nas y por eso su ausencia de los medios sociales y del ojo público, desde diciembre.
La publicación revela que Nicki intentó ser discreta en la ropa que eligió – un vestido de color crema – para la fiesta después de los Oscar, organizada por Beyoncé.
Los testigos que la vieron dijeron al sitio que ‘Nicki está muy embarazada’.
Ni la cantante, ni sus representantes han confirmado o desmentido las noticias todavía.
Fuente: La Botana
Tras la petición de mano de Fedez a la bloguera y empresaria Chiara Ferragni este fin de semana, en GQ nos hemos visto sorprendidos por el extraño magnetismo que despierta la estética de este rapero italiano. Cualquiera diría que se viste con la luz apagada, pero lo cierto es que en su desorden hay atisbos de lucidez. Reconozcámoslo: Fedez no es Lil Yachty ni tampoco Big Sean, y mucho menos Kanye West. Al contrario, se parece más a un ‘guido’ que al marido de Kim Kardashian, pero tiene cierta idea.
En sus looks hay reminiscencias del estilo ‘paninaro’, célebre en la Italia de los años 80. Esta subcultura nació como consecuencia de una época de bonanza y celebración del estilo de vida americano. Muchos pijos italianos sucumbieron a la eclosión del ‘fast food’, las motos Zündapp 175 y la música pop. Vestían bombers de Schott, plumas de Moncler, chaquetillas de CP Company y zapatillas Vans. Les encantaban los pantalones de Armani Jeans, los colorines y las etiquetas bien visibles. Fueron los análogos europeos del ‘preppy’ en los años del consumismo feroz.
Y lo cierto es que Fedez nos gusta, pero también nos desconcierta. A continuación, enumeramos tres razones por las que amamos su estilo y otras tres por las que lo odiamos. Empecemos con las primeras.
A FAVOR
1. No todo el mundo es un ‘gentleman’. Fedez es un rapero y punto. No pretende ser otra cosa. Por el éxito de sus canciones en suelo italiano y su pasión por la moda –que la ama es evidente–, podríamos considerarlo, en cierta medida, un Kanye West a la europea. No en vano se va a casar con una ‘instagramstar’, Chiara Ferragni, cuyo modelo de negocio se estudia hasta en Harvard –Ferragni y su exnovio Riccardo Pozzoli ya han impartido varias conferencias en esta universidad–. Fedez, al igual que todos los raperos, tiene una personalidad muy definida que recibe ‘inputs’ de todas partes: la moda de lujo, las firmas ‘streetwear’, la historia de su país, sus colegas estadounidenses… En definitiva, cuenta con un discurso estético forjado a base de miles de influencias. Y en este caso la ensalada no es ningún desastre.
2. No teme a la experimentación. Un reconocimiento a vuelapluma de su Instagram, sus conciertos y sus apariciones públicas, nos da una pista sobre su ausencia de miedo. En este fresco renacentista de firmas de lujo, colores, tejidos y cortes encontramos la completa asunción de una de las tendencias que triunfará el próximo otoño, la de la elevación de la calle –y viceversa– por obra y gracia de Louis Vuitton by Supreme. Nada nuevo en el frente, es cierto, pero recordemos que hace cinco años Kanye West y Virgil Abloh eran considerados poco menos que unos parias ‘outsiders’.
3. Italia vs. USA. En Federico Leonardo Lucia, alias Fedez, hay ’souvenir jackets’ de Gucci, bombers de Moschino, camisetas de Supreme y moda deportiva de Thrasher. Alta cuna, baja cama. El estilo ‘paninaro’ del siglo XXI tiene en el cantante de ‘Vorrei ma non posto’ un embajador de lujo.
EN CONTRA
1. Pero Fedez no es Kanye West. Que se parezca algo no significa que sea como él. Ni siquiera tiene un aire a Chance The Rapper o Travis Scott. Fedez cuenta con el dinero y el interés para ser como ellos, pero le falta algo genuino. El estilo del rapero italiano nos llama la atención porque en su país es único en su especie, pero dudamos mucho de sus posibilidades si mantuviera su estética en la selva estadounidense. Fedez es una amalgama de estilismos ya inventados, y eso está bien si además se apoya en algo propio, muy propio. Y eso no lo vemos.
2. Sprezzatura, ubi sunt? Este término acuñado en el siglo XV hace referencia a los hombres con más estilo del mundo, los que marcan una actitud elegante y estudiadamente relajada. Su autor fue el diplomático italiano Baldassare Castiglione, en cuya obra ‘El Cortesano’ explicaba la falta de afectación que debía mostrar todo ‘gentleman’ –en resumen, que un impecable look parezca un accidente–. Se usa, sobre todo, en el ámbito del ’tailoring’. Fedez tiene 27 años y procede del país donde nació la sastrería moderna –al alimón con los británicos–. Por eso echamos en falta un poco de atrevimiento con los trajes, pues ya es hora de que se haga uno a medida. Fedez, chato, que eres milanés…Y tienes casi 30 años.
3. Un árbol de Navidad. Su talón de Aquiles es el oro, la plata y la quincalla. Como todo buen rapero, se pirra por la joyería sin medida: colgantes, anillos, pulseras… Y eso nos sobra un poquito. Además, Fedez usa siempre el mismo calzado: zapatillas de caña alta y Vans. Más osadía, hombre. Por último, a nuestro juicio, sus tatuajes dejan mucho que desear; no tanto por la forma, sino por el color. David Beckham o Conor McGregor son un buen ejemplo de ’tattoos’ bien ejecutados. Los de Fedez son un poco de aquella manera.
