La actriz se refirió al arresto del controversial productor.
Después de que Harvey Weinstein se entregara ante las autoridades de Nueva York este viernes, Rose McGowan habló sobre el productor caído en desgracia con Megyn Kelly de NBC News.
Weinstein fue arrestado con cargos de violación en primer y tercer grado, así como de acto sexual criminal en primer grado, por forzarse sexualmente contra dos mujeres en 2013 y 2004, respectivamente.
«El Sr. Weinstein siempre ha mantenido que nunca se ha involucrado sexualmente con alguien de ninguna manera no consensuada», aseguró el abogado de Weinstein, Benjamin Brafman, a través de un comunicado. «Nada de los procedimientos de hoy cambia la posición del Sr. Weinstein. El Sr. Weinstein sostiene que es ‘No Culpable’ de los cargos de los que se le acusan hoy y confía que será exonerado por completo».
McGowan describió la experiencia de ver a Weinstein esposado, tanto «surreal» como «real» al mismo tiempo. Sin embargo, admitió que era una «muy buena sensación».
Sin embargo, McGowan alegó que Weinstein todavía «tiene privilegios de arriba». Precisó que se entregó el viernes antes del Día de la Memoria, que tiende a ser un «fin de semana poco noticioso».
Dijo, de todos modos, «Este es un gran golpe al corazón del abuso de poder».
«Le demuestra a todos alrededor del mundo lo que siempre esperé, que esto no podrá seguir», aseguró.
McGowan dijo que Weinstein probablemente nunca pensó que este día llegaría. Y agregó, «El sistema fue creado por hombres como él y sus cómplices, para protegerlo».
«Tuvo la osadía de caminar en la Marcha de Mujeres en Sundance, donde me violó», le dijo a Kelly. «Es intenso».
También dijo que sabía de «una mujer que acosa sexualmente a alguien», y alegó que el abuso de poder es un problema «neutral» con respecto al género.
Cuando Kelly le preguntó a McGowan si pensaba que ella y las otras víctimas habían obligado al Fiscal Cyrus Vance a actuar contra Weinsten, la actriz respondió «absolutamente».
«Es trágico que se requiera a más de 100 mujeres y probablemente eso quiere decir que 1.000. Seamos honestas», dijo McGowan. «Este hombre cazaba alrededor de todo el mundo. Tenía cómplices y una maquinaria de complicidad. Era un líder de culto en Hollywood, diría que su rey».
Weinstein es una de las muchas caras famosas en Hollywood que han enfrentado casos de conducta sexual inapropiada. McGowan dijo que entiende que puede haber un poco de «fatiga» pública después de la oleada de acusaciones, pero aseguró que es importante «deshacerse de las manzanas podridas».
«Quería mostrarle a las personas que si quitas la cabeza de poder, eso limpia la casa», dijo. «En vez de convertirnos en activistas para morder talones, quería la cabeza. Este movimiento se trata de ser buena persona. De ser humano. De tratar a otros con dignidad humana, con respeto humano. Siempre habrá sociópatas, depredadores como Harvey Weinstein, pero me parece que más culpa tiene la maquinaria de complicidad».
Cuando le preguntaron qué le diría a Weinstein si él la estuviera viendo, las palabras de McGowan fueron breves.
«Te atrapamos», dijo.
McGowan aseguró que Weinstein fue «una constante sombra en su vida». Ahora que fue arrestado, dijo que no quiere verlo de nuevo y que quiere ser «libre».
«Voy a decir esto: desde que se conoció la noticia —a pesar de que su cara está en todas partes— no he tenido ni una sola pesadilla», agregó.
Además de hablar de Weinstein, McGowan habló de la ex esposa de Weinstein, Georgina Chapman. Cuando le preguntaron si ella creía que la diseñadora de modas sabía de las acusaciones, McGowan contó la siguiente historia.
«Me senté entre ellos —entre Harvey Weinstein y Georgina Chapman— en Cannes hace unos siete, ocho años. Me senté allí a propósito. Fue muy incómodo. Ella no me miraba a la cara. Eso es todo lo que diré al respecto».
McGowan pareció sugerir que hoy se hizo justicia de alguna manera.
«El hombre que me inmovilizó hoy está esposado», dijo.
Antes de la entrega de Weinstein, McGowan acudió a Instagram para decir que estaban «un paso más cerca de la justicia».
«Yo, y muchas de las otras sobrevivientes de Harvey Weinstein, abandonamos la esperanza de que nuestro violador le rindiera cuentas a la ley», escribió. «Hace veinte años juré que corregiría este error. Hoy estamos un paso más cerca de la justicia. Éramos mujeres jóvenes, fuimos asaltadas por Weinstein y luego aterrorizadas por su vasta red de complicidad. Estoy de pie junto con mis compañeras sobrevivientes. Que su arresto le de esperanzas a todas las víctimas y sobrevivientes que cuentan su verdad».
En octubre de 2017, el New York Times publicó un revelador reportaje sobre Weinstein en que varias mujeres —incluyendo a McGowan y Ashley Judd—, acusaron a Weinstein de conducta sexual inapropiada. El periódico informó que McGowan había llegado a un acuerdo de 100 mil dólares con el productor en 1997, «después de un episodio en un cuarto de hotel durante el Festival de Cine Sundance».
En ese momento, el abogado Charles J. Harder le contó a E! News en un comunicado que el artículo estaba «saturado de declaraciones falsas y difamatorias».
A finales de ese mes, McGowan acusó a Weinstein (a quien habían despedido de su compañía) de violación. McGowan es una de las múltiples mujeres que han acusado al productor de violación.
Un vocero de Weinstein le dijo a E! News, «El Sr. Weinstein niega cualquier alegato de sexo no consensuado».
McGowan luego agregó que personas «cercanas al productor» le habían ofrecido 1 millón de dólares por no hablar de sus denuncias. Aseguró que le dijo a su abogado que rechazara la oferta, días antes de que el New York Times publicara el reportaje.
Weinstein no comentó sobre estos señalamientos.
El ajuste de cuentas ha llegado para el productor.
La mañana de este viernes 25 de mayo, Harvey Weinstein se entregó a las autoridades en el 1er precinto del Departamento de Policía de Nueva York, donde se tomaron las huellas digitales y lo fotografiaron. Momentos después, fue acusado de violación, acto sexual criminal, abuso sexual y mala conducta sexual por incidentes en los que participaron dos distintas mujeres.
«El Departamento de Policía de Nueva York agradece a estos valientes supervivientes por su valentía para presentarse y buscar justicia», dijo un vocero. «El arresto y los cargos resultantes son el resultado de una investigación conjunta entre el Departamento de Policía de Nueva York y la Fiscalía de Distrito de Manhattan». Fue transportado a la Corte Criminal del Condado de Nueva York.
Dos fuentes le dijeron a NBC News que se espera que sea liberado con una fianza de 1 millón de dólares y que se le pida que use un monitor de tobillo.
Weinstein sonriente, vestido con un suéter azul y un blazer negro, ignoró las preguntas de los reporteros cuando apareció para entregarse. Se lo vio llevar tres libros, incluido Elia Kazan: Una biografía y algo maravilloso: la revolución de Broadway de Rodgers y Hammerstein.
Los relatos del The New York Times: Jodi Kantor y Megan Twohey y de The New Yorker’s Ronan Farrow, ayudaron a muchas de sus acusadoras a contar su historia por primera vez. Desde entonces, casi 100 mujeres han acusado a Weinstein de acoso sexual y, en algunos casos, de violación. El intocable Weinstein, a través de su equipo legal, ha negado todas las acusaciones.
Rose McGowan, quien llegó a un acuerdo de 100.000 dólares con Weinstein relacionado con un encuentro en 1997, emitió un comunicado el día antes sobre la noticia, después de que se informó que se entregaría a las autoridades. «Yo, y muchos de los sobrevivientes de Harvey Weinstein, habíamos perdido la esperanza de que nuestro violador fuera responsabilizado por la ley. Hace veinte años, juré que corregiría esto», dijo. «Hoy estamos un paso más cerca de la justicia. Éramos mujeres jóvenes que fueron atacadas por Weinstein y luego aterrorizadas por su vasta red de complicidad».
«Me uno a mis compañeros sobrevivientes», agregó McGowan, quien habló con Farrow para su artículo inicial. «Que esto dé esperanza a todas las víctimas y sobrevivientes en todas partes que dicen sus verdades».
Algunos de los acusadores más prominentes de Weinstein incluyen a Rosanna Arquette, Salma Hayek, Angelina Jolie, Ashley Judd, Lupita Nyong’o, Gwyneth Paltrow, Mira Sorvino y Uma Thurman. «Hoy Harvey Weinstein dará su primer paso en su inevitable descenso al infierno», twitteó Asia Argento, otra acusadora. «Nosotras, las mujeres, finalmente tenemos una verdadera esperanza de justicia».
The New York Times y The New York Daily News informaron el jueves que el caso probablemente involucre acusaciones de que Weinstein había presionado a Lucia Evans para que practicara sexo oral durante una audición en 2004; el sexo oral forzado se considera un delito de Clase B en el estado de Nueva York, con una sentencia máxima de 25 años de prisión, y ese delito en particular no tiene un plazo de prescripción.
El abogado de Weinstein, Ben Brafman, no quiso hacer comentarios el jueves. En una declaración judicial a principios de este mes, escribió: «El Sr. Weinstein actualmente está en tratamiento por problemas personales con la esperanza de convertirse en una mejor persona y un día, con suerte, restaurará su vida y continuará la búsqueda de la extraordinaria caridad que tiene. siempre comprometido. Weinstein niega enérgicamente haber cometido una falta sexual criminal y, si se le da la oportunidad de defenderse por completo, cree que todas estas acusaciones carecerán de mérito «.
