Pigmento vegetal presente en todas las plantas y que es fundamental para la vida, la clorofila posee propiedades terapéuticas que van desde el poder para regenerar nuestro organismo a nivel molecular y celular, hasta su capacidad para desintoxicar y depurar el cuerpo, combatir infecciones, ayudar a curar heridas y promueve el funcionamiento del sistema circulatorio.

De acuerdo con Richard Willstätter, ingeniero químico alemán galardonado con el Nobel, halló que la molécula de la clorofila a tiene una similitud  con la de la hemoglobina, el pigmento rojo de la sangre humana y al igual que ésta  está compuesta por cuatro elementos: carbón, hidrógeno,  oxígeno y nitrógeno.

Sin embargo, los beneficios de la clorofila van más allá su semejanza con la sangre. Un estudio realizado por el experto Richard C. Heimsch de la Universidad de Idaho en Estados Unidos, el riesgo de padecer cáncer de hígado, colon, estómago y pulmón se puede reducir a la mitad mediante la ingesta diaria apropiada de clorofila.

La mayoría de las plantas contienen clorofila, pero las de mayor cantidad son las siguientes: acelgas, alfalfa, algas (en especial la chlorella), apio y berros.

Fuente: salud180.com