El asma es una enfermedad respiratoria crónica que se manifiesta durante los primeros cinco años de vida, cuyos síntomas pueden acentuarse con el invierno y presentarse más crisis asmáticas, explica el doctor Carlos León Ramírez, Director General del Centro de Asma y Alergia de México.
Una de las medidas básicas es la higiene, debido a que lavarse las manos correctamente ayuda a prevenir contagio de virus, como el de la gripe o influenza, que generan hasta 50% más crisis asmáticas en niños y adultos, según los Centers for Disease Control and Prevention de Estados Unidos.
Evitar el contacto con los diversos alérgenos o desencadenantes ambientales (polvo, ácaros, moho, pelo de animales o peluches, humo de tabaco y contaminación), así como los cambios bruscos de temperatura y pasar de un ambiente cálido a frío o viceversa.
De acuerdo con especialistas del Centro Pediátrico Johns Hopkins,cuanto más baja sea la temperatura (sobre todo por la noche y mañana), mayor será el riesgo de padecer una crisis, por lo que es importante cubrirse la nariz y boca con una bufanda o tapabocas, así como abrigarse. Lo ideal es no exponerse al frío de no ser necesario.
El frío combinado con la actividad física incrementa el riesgo de unacrisis de asma, reitera el doctor León Ramírez, más aún en un lugar como la Ciudad de México, donde se presentan las condiciones el efecto invernadero.
No obstante, explica, eso no significa que (excepto por los días de frío extremo) no se pueda hacer ejercicio al aire libre, sino que hay que tener especial cuidado, como no practicar un ejercicio demasiado exhaustivo, beber muchos líquidos, reforzar las defensas y nunca ejercitarse solos o sin avisar a alguien más, para prevenir consecuencias graves de una crisis asmática.
Fuete: salud180.com