No se puede negar, Amanda Bynes se está portando muy bien. Sin embargo, eso no quiere decir que no tenga asuntos pendientes que atender.

En esta oportunidad se trata específicamente del episodio que protagonizó en el 2012 en el que fue arrestada por conducir bajo la influencia de sustancias ilegales, siendo este uno de los tantos escándalos de Amanda.

Según informó su abogado Richard Hutton, la defensa logró llegar a un acuerdo y obtuvieron la pena menor, por lo que Bynes fue condenada a 3 años de libertad condicional y también deberá completar 3 meses de un programa de educación acerca del alcohol.

En ese entonces, Amanda chocó su BMW contra otro vehículo en West Hollywood. Luego de eso también enfrentó acusaciones, incluyendo cuando lanzó una pipa de agua por la ventana de su departamento en Nueva York.

Amanda Bynes salió de un centro de rehabilitación en diciembre del año pasado, esto como parte de la sentencia que la obligaba a permanecer ahí por 6 meses. Tras abandonar el centro, se ha visto a la actriz tomando clases en Fashion Institute of Design and Merchandising.

Fuente: la.eoline.com