Forma con tu hijo un equipo en el que ambos intercambien opiniones para que la fiesta sea a su gusto y de acuerdo a tus posibilidades. Permite que se involucre, ayudándote en la organización.
Sé creativa y original, basándote en la personalidad del cumpleañero. No copies otras fiestas, solo tenlas como referente.
Deja que sea tu hijo quien decida a qué amigos invita. Jamás hagas de la fiesta una reunión de tus amistades.
Prepara un menú adecuado para los niños y dale a cada plato una llamativa presentación para que puedan comerlo con gusto. Pregunta a los papás si sus hijos tienen alguna alergia alimentaria.
Es preferible celebrar en casa hasta la edad de 4 años para que los niños se sientan más cómodos y sea más fácil para ti estar pendiente de todo.
Si piensas alquilar un local para fiestas infantiles, pide referencias y pregunta por la seguridad de los juegos y de todo en general.
Para la animación y entretenimiento, recuerda que existen diversos artistas profesionales que harán que la fiesta sea memorable. Los actores formados como payasos, mimos, magos o titiriteros son una gran alternativa. También están los acróbatas, malabaristas, bailarines, cuenta cuentos, etc.
Elabora una lista de juegos alternados: uno más activo, luego uno más tranquilo; uno físico y otro para pensar. Ten a la mano lo necesario: materiales, música, premios, etc.
Los globos y las guirnaldas nunca fallan; el resto de detalles dependerá del concepto de la fiesta.
Organiza alguna actividad manual para que al finalizar los niños se lleven aquello que crearon. Podrían pintar trencitos de madera, hacer máscaras de papel reciclado, etc.
Fiestas temáticas
La edad, los gustos y el momento del año son claves para decidirse por un tema u otro. Busca en internet, libros o programas de historia, ciencias naturales, cine, etc. para tener más ideas aparte de las típicas.
Fuente: Revista Mariela