.

Mientras el niño chino Wengenn Liao duerme, su madre, Queenie Liao, imagina sus sueños en elaboradas composiciones fotográficas. Ahora un libro publicado en Taiwán, ‘El bebé durmiente’ (‘Wengenn in Wonderland’ en su edición en inglés), recoge las mejores imágenes.

Para ilustrar las aventuras oníricas de su bebé, Queenie tomó cientos de fotografías acomodando objetos cotidianos alrededor del niño. ‘Primero monto la escena’, explica Queenie. ‘Y cuando se duerme lo pongo en medio de la composición’.

‘Empiezo con un fondo simple con el sol, nubes o la Luna y lo voy haciendo más complejo. Uso mantas, ropa, juguetes, peluches y hasta papel higiénico’, dice Queenie.

‘Todo está preparado de antemano para su siesta. La composición es como la de una pintura. A veces el niño se despierta en mitad de la sesión fotográfica y entonces dejo la cámara y juego con él. No quiero tomar las fotos con prisa, porque las mejores imágenes salen cuando duerme plácidamente’.

‘Las composiciones reflejan mis sueños y esperanzas para mi bebé, porque quiero que él sea capaz de alcanzar todos sus sueños’, añade Queenie.

‘Utilizo tanto color como puedo, como si se tratase de un libro infantil ilustrado. Uso faldas para Luna, calcetines para los peces, cinturones para las serpientes. Antes, todas las fotos se las tomaba cuando dormía. Ahora que el ha crecido un poco lo fotografío despierto’.

‘Mi fuente de inspiración para los decorados son los cuentos de hadas de mi infancia y mis propios recuerdos y sueños infantiles’, dice la madre del bebé.

‘Ésta es la mejor forma de mostrar mi amor por él y también mantener un recuento de su vida, porque crece muy rápido. Es algo hecho con amor y sé que tanto yo como él atesoraremos estos momentos siempre’.

Fuente: noticias.latam.msn.com