¿Te has preguntado alguna vez como sería tomar el té con la Reina Isabel II? Si tu respuesta es ‘sí’, prepárate para dar el primer paso hacia tu sueño. El mes que viene, la Royal Collection Trust publicará el primer libro oficial de cocina dedicado a la hora del té más palaciega, bajo el título de Royal Teas: Seasonal Recipes from Buckingham Palace (Té real: recetas de temporada del Palacio de Buckingham). La autoría corre a cargo del Chef Real Mark Flanagan, que lleva más de una década organizando el tradicional servicio de té de la residencia real. Además, complementa con acierto el tomo anteriormente publicado, A Royal Cookbook: Seasonal Recipes from Buckingham Palace.

A continuación, extraemos tres recetas que seguro habrá disfrutado Su Majestad en alguna ocasión. Ya sea con unas Drop Scones (las tortitas preferidas de la reina) o con la Victoria Sponge (tarta que debe su nombre, como no, a la reina Victoria), disfrutarás, en nada de tiempo, de un majestuoso tentempié.

Victoria Sponge

Es una manera exquisita de dar salida a la mermelada casera. La reina Victoria tenía fama de golosa, y de ella tomó su nombre esta tarta ligera y deliciosa.

Ingredientes

Para el bizcocho:
3 huevos camperos
150 g (3/4 de taza) de azúcar (Castor o fina) sin refinar
150 g (2/3 de taza) de mantequilla sin sal, previamente reblandecida
150 g (1 + 1/4 de taza) de harina con levadura, previamente tamizada
1/2 cucharadita de esencia de vainilla

Para la crema de vainilla:
150 g (2/3 de taza) de mantequilla sin sal, previamente reblandecida
220 g (1 + 3/4 de taza) de azúcar glas, previamente tamizada
1/3 de rama de vainilla

Mermelada de fresa casera

Utensilios
2 moldes para tarta de 20 cm

Preparación de la tarta:

Precalienta el horno a 180 º.
Unta los moldes con mantequilla y cubre el fondo con un trozo circular de papel de hornear. Déjalo a un lado.
Pon en un bol el azúcar fino, la esencia de vainilla y la mantequilla reblandecida, y mézclalo hasta que se forme una crema ligera y esponjosa.
Después, añade los huevos batidos, poco a poco para evitar que se formen grumos. Finalmente, añade la harina hasta que todos los ingredientes estén perfectamente mezclados.

Vierte la mezcla por igual en los dos moldes y trata de nivelarlas suavemente para que las dos tengan la misma altura. Coloca los moldes en la bandeja central del horno y hornea durante unos 20 minutos o hasta que la tarta se dore. Como prueba, hunde un cuchillo en la masa, y si sale limpio, será que está hecha. Sácalas del horno y déjalas reposar unos minutos antes de darles la vuelta sobre la rejilla.

Preparación de la crema:

Mezcla la mantequilla reblandecida con el azúcar glas y las semillas de vainilla previamente extraídas. A medida que batas, la crema se volverá más clara y esponjosa con algunas motas de las semillas.

Cómo montar la tarta:

Cuando las tartas estén ya completamente frías, unta suavemente la crema sobre la parte superior de la primera. Después añade encima una fina capa de mermelada. Ahora coloca con cuidado la segunda tarta sobre la primera y presiona un poco. Para finalizar, espolvorea el azúcar glas sobre la parte de arriba.

¡Y no olvides servirla con una taza de té!

Drop Cones

Estas pequeñas tortitas, que se cocinan vertiendo la mezcla sobre la típica plancha, tienen su versión en todas las cocinas del mundo. Las Drop Scones, o tortitas escocesas, son muy parecidas a las tortitas americanas y se pueden tomar con mantequilla derretida, untarlas con mermelada o aderezadas con sirope de arce. ¡Están buenas de cualquier manera!

Ingredientes
1 huevo campero
2 cucharadas de azúcar fino sin refinar
1 cucharadita de mantequilla sin sal, derretida previamente
250 ml (1 taza) de leche entera
1 cucharadita de bicarbonato sódico
240 g de harina
2,5 cucharaditas de levadura
1,5 cucharaditas de cremor tártaro (si no lo encontráis, podéis sustituirlo por levadura, tanto en este caso como con el bicarbonato)
100 g (media taza) de mantequilla clarificada sin sal

Utensilios
Una plancha para tortitas o una sartén antiadherente

Instrucciones

En un bol, mezclar todos los ingredientes en polvo: la harina, el bicarbonato, el cremor tártaro y el azúcar. Añade la leche y los huevos, y bate hasta que la mezcla se suavice. Por último, añade la mantequilla derretida, y mezcla de nuevo. Pásalo todo por un colador para evitar grumos y, si está demasiado espesa, añade un poco más de leche. La mezcla debería tener la bastante fluidez como para poder verterla, pero teniendo algo de consistencia para que mantenga la forma en la plancha.
Calienta la plancha (o la sartén) a fuego medio y engrásala con la mantequilla clarificada. Con una cuchara de postre o una paleta pequeña, vierte cucharadas de la mezcla sobre la plancha. Cuando un lado ya esté hecho, despega la tortita con una espátula y cocina del otro lado. Cuando vayas cogiendo confianza podrás hacer varias tortitas al mismo tiempo, siempre vigilando que no se hagan demasiado.
Servir calientes con mantequilla o mermelada casera.

Tarta de zanahoria

Esta tarta de aspecto oscuro y sabor especiado es muy jugosa a la par que adictiva.

Ingredientes
2 huevos camperos pequeños
105 g (1/2 taza) de azúcar moreno sin refinar
105 g (1/2 taza) de azúcar moreno parcialmente refinado
150 g de harina integral
1/4 de cucharadita de sal
1/2 cucharadita de bicarbonato sódico
1/2 cucharadita de nuez moscada molida
1 cucharadita de canela molida
35 g de crema agria
105 g de aceite de girasol
180 g de zanahoria rallada
45 g (1/2 taza) de coco desecado

Para el topping de crema de queso:

110 g (1/2 taza) de queso en crema
50 g (1/4 taza) de mantequilla sin sal
50 g (1/3 taza) de azúcar glas.
El zumo de medio limón.

Utensilios:
Molde de 18 cm.

Instrucciones:

Precalienta el horno a 170º.
Prepara el molde. Engrásalo con la mantequilla y cubre el fondo y las paredes con papel de horno. Coloca el molde sobre la bandeja del horno con cuidado de que esté plana. Apártalo de momento.
Bate en un bol los huevos, los dos tipos de azúcar y el aceite de girasol hasta que la mezcla sea uniforme. En otro bol, pon la harina, la sal, el bicarbonato y las especias. Vierte esta mezcla sobre la de los huevos y remueve hasta que todo esté bien mezclado. Por último, echa la zanahoria rallada y la crema agria.
Ahora, vierte toda la mezcla en el molde. Coloca la bandeja en la parte central del horno y deja que se haga unos 35 minutos, o hasta que la superficie de la tarta esté esponjosa. Una vez horneada, sácala del horno y déjala enfriar.

Para el topping de crema de queso:

Mezcla en un bol el azúcar glas y la mantequilla previamente reblandecida. Remuévelo bien hasta que la mezcla sea ligera y esponjosa. Añade el queso en crema y sigue batiendo hasta que consigas una mezcla suave. Por último, incorpora despacio, mientras bates, el zumo de limón.

Para montar la tarta:

Una vez que esté fría, extrae la tarta de zanahoria del molde y colócala sobre el plato o el pie de tarta que prefieras. Con una paleta, reparte con cuidado la crema de queso sobre la parte superior.

Fuente: vogue