«VIRIDIANA» LA SUPUESTA MALDICIÓN QUE ASECHA A LA DINASTÍA PINAL
En 1961, Silvia Pinal se consolidó como una de las actrices más cotizadas y admiradas de su tiempo, convirtiéndose en una musa para el renombrado director Luis Buñuel. Dos años más tarde, en 1963, Silvia y su entonces esposo Gustavo Alatriste dieron la bienvenida a su única hija, Viridiana Alatriste.
A principios de los años 80, Viridiana comenzó su carrera en la televisión, participando en el programa de comedia ¡Cachún-cachún-ra-ra! y en el melodrama Mañana es primavera, telenovela en la que su participación quedó truncada.
Sin embargo, la vida de Viridiana fue trágicamente interrumpida cuando, a los 19 años, perdió la vida en un accidente de tránsito en las calles de la Ciudad de México el 25 de octubre de 1982. Silvia Pinal, en su autobiografía, expresó lo desgarrador de la pérdida: «La muerte de Viridiana fue para mí como un reloj que se detuvo de pronto, y aunque me empeñé en darle cuerda, nunca más funcionó igual.»
La tragedia no terminó allí. Años después, la hermana de Viridiana, Sylvia Pasquel, tuvo una hija en 1985, a quien llamó Viridiana en honor a su hermana fallecida. Sin embargo, esta pequeña niña también sufrió un destino cruel. A los dos años, murió ahogada en un accidente en la piscina de su casa. Sylvia Pasquel relató que la niña había seguido a un patito que le regalaron y, al caer en el agua, perdió la vida mientras jugaba en el jardín. En un momento de descuido, la tragedia ocurrió mientras Sylvia se encontraba fuera de casa. «Fue en un momento de descuido de la nana”.