El cantante no la pasó nada bien…
El hecho de que hoy en día, Ricky Martin se haya convertido en uno de los grandes defensores de la comunidad LGBTQ, al tiempo que revalida año tras año su estatus de estrella latina y como uno de los hombres más deseados del mundo, ha conseguido que muchos olviden que hace siete años el cantante se encontraba en un momento muy delicado en el terreno profesional debido a los rumores en torno a su orientación sexual, que finalmente -y en contra del consejo de todos sus allegados- decidió confirmar.
«Amigo mío, no tienes ni idea… a mí me llevó mucho tiempo», recordó el astro boricua a su paso por el programa The Daily Show with Trevor Noah acerca de ese momento decisivo en su vida. «La cuestión es que estaba rodeado de amigos que me decían que no lo hiciera, que sería el final de mi carrera».
Pese a que estaban completamente equivocados, el intérprete sabe que la intención de quienes trataron de disuadirle de que hiciera pública su homosexualidad era buena, y su postura se debía simplemente a que habían crecido en el mismo ambiente de represión que él.
«Se trataba de gente que me quería de verdad, que tenía buenas intenciones y que habían sido también a su vez víctimas de la homofobia. Tienes que entender que crecí en una cultura en la que se me decía que lo que estaba sintiendo estaba mal, que era maligno. Y si encima le añades que yo era… bueno, una especie de sex-symbol, imagínate. Y todo el mundo me decía que sería mi final», apunta.
En su caso, la gota que colmó el vaso y que le hizo darse cuenta de que no podía continuar escondiéndose fue el nacimiento mediante una gestación subrogada de sus mellizos Matteo y Valentino. Por ellos, el cantante -que ahora está casado con el artista plástico Jwan Yosef- decidió que debía vivir abiertamente para garantizar su propio bienestar emocional y, por extensión, el de sus retoños.
«Resultó muy doloroso para mí, hasta que decidí que no podía soportarlo ni un segundo más. Ahora se trataba solo de mí, no de lo que pudiera pasar a mi alrededor, lo importante eran qué necesitaba yo para ser feliz. Y entonces tuve a mis hijos, y supe que tenía que salir del armario porque no podía mentirles a esos niños preciosos», declaró emocionado.
Fuente: E-News